Etiquetas

Mostrar más

Detrás de Terminator se ven algunas sombras

Terminator es la mejor película de James Cameron. También es una de las tres o cuatro mejores películas de ciencia ficción de los años ochenta. Además, acertamos si creemos que es una de las más oscuras de todos los tiempos. Y sin duda es la mejor película de Linda Hamilton y de Arnold Schwarzenegger. 

Pero hasta Terminator tiene sus precursores. La saga de los Berserker, de Fred Saberhagen, va de unas máquinas que surcan el espacio exterior en busca de humanos. Estas máquinas sobrevivieron a la guerra para la que fueron creadas, a sus fabricantes alienígenas, a los ingenieros que, genocidas, las diseñaron, y sobrevivieron también a sus enemigos originales. Pero todavía cruzan, obstinadas, el vacío sideral con la única misión que les fue encomendada: capaces de autorrepararse, de reproducirse, lo único que hacen es, como Terminator, encontrar y matar humanos. Esa eterna vocación homicida que veremos años después en las máquinas de Cameron. Saberhagen, que le cuesta mucho ocultar su machismo, en uno de los cuentos de The Ultimate Enemy, nos dice que esa "armada" aplastó a sus enemigos cuando la humanidad hacía sus primeros dibujos en las cavernas. 

Harlan Ellison es un broncas de cuidado. Pese a que sus cuentos solo sean un vehículo para llegar a la moraleja de turno, pese a que todo gire en torno a esa enseñanza que de nada sirve, por ya sabida y por cutre, pese a que todo desemboque en un giro final moralizante, su cuento "Soldier", que es de los buenos, es el otro claro precursor de Terminator. Pero quién es este Harlan Ellison, a parte de, como digo, un broncas de cuidado. Cuentista, novelista, antólogo y crítico literario, Ellison es el tipo que demandó a Cameron por plagio, que lo llamó "ese director empapado de ego", que no duda en insultar a sus lectores; una especie de matón de las letras, bronco, bravucón, malhablado, rudo y tabernario. Lástima que en sus cuentos esta faceta quede un poco diluida y sea algo inocua al lado de sus conclusiones tan graves y aleccionadoras. Pero "Soldier". De qué va "Soldier". De un soldado de una guerra futura, que, en medio de una batalla, viaja involuntariamente al pasado. En un mundo en trance de convertirse en postapocalíptico, hace el mismo movimiento que Michael Biehn en Terminator: viaja a un pasado en el que todavía existe la esperanza. Él es, en sí mismo, con su arma láser y sus historias de un futuro en guerra, la advertencia que, por una vez y al contrario que en Terminator, los humanos no desoyen. Cuatro retazos del futuro que nos espera, escritos por un broncas de cuidado en 1965, acabaría sofisticándose en la mente de Cameron hasta convertirse en, no me gusta decirlo así pero lo diré otra vez, la mejor película de Cameron. Pero en "Soldier" la humanidad escucha al involuntario viajero en el tiempo, a esta reliquia del futuro, y rectifica sus pasos equivocados. 

Comentarios

Entradas populares